El pasado sábado 25 de octubre se clausuró la 59ª edición de la Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci) tras la gala donde se entregaron los premios de este 2014 (palmarés en su web).
El Teatro Calderón, sede principal de la Seminci, el domingo 19 de octubre, minutos antes del pase matinal, a las 9 horas, de dos de los títulos que se llevaron premio en la Sección oficial: «Sinfonía nº 42» (Réka Bucsi, Hungría), Espiga de Oro Cortometraje; «Whiplast» (Damien Chazelle, EEUU), Premio «Pilar Miró» al Mejor Nuevo Director.
Ocho días de una intensa y nutritiva selección de más de 200 películas, en formato largo y corto, acompañadas de presentaciones, coloquios, mesas redondas, exposiciones de libros… AtmósferaCine este año solo pudo disfrutar de los primeros días de este veterano Festival, si bien iremos contando lo que más le enriqueció. Por ahora, una panorámica visual de algunos de los momentos vividos y de sus paisajes originales.
Por numerosos puntos de la ciudad vallisoletana podía contemplarse el cartel de la Sección oficial de esta Seminci 2014, obra del diseñador gráfico Toni Pontí, titulado «Andrea» en alusión a su joven modelo y que ilustraba la siguiente propuesta: «Soñar es una manifestación de imágenes, sonidos, pensamientos y sensaciones asociados a la realidad o a la ficción. El cine también. Andrea sueña, huele, escucha, respira y proyecta cine. Soñar con los ojos cerrados».
Entre esos escenarios, las propias calles de la ciudad…
En la céntrica calle peatonal Santiago volvía a poder contemplarse la historia de la Seminci a través de sus carteles. Próxima a cumplir su 60 aniversario, en la imagen varios de los carteles que promocionaron su quinta década de vida.
y las diferentes salas que acogieron sus numerosas proyecciones: Teatro Calderón, Teatro Carrión, Teatro Zorrilla, Cines Broadway, Espacio LAVA, Auditorio Miguel Delibes, Aula Mergelina de la Universidad de Valladolid…
El Teatro Zorrilla, ubicado en la Plaza Mayor, es uno de los más antiguos de la ciudad. El propio escritor vallisoletano José Zorrilla asistió a su inauguración en octubre de 1884. Utilizado como cine desde hace unas décadas, en este certamen de la Seminci pudimos ver en él varios de los largometrajes de la Sección Punto de Encuentro.
El Teatro Carrión, muy cercano a la Plaza Mayor, es otro de los recintos culturales históricos, inaugurado en marzo de 1943. Asistimos en él a la primera proyección de este certamen: el pase matinal del largometraje «Dos días, una noche» (Deux joux, une nuit), de Jean-Pierre y Luc Dardenne, uno de los mejores títulos de esta edición.
Inaugurado en septiembre de 1864, el Teatro Calderón de la Barca, sede principal de la Seminci, cumple este año su 150 aniversario. La gala inaugural de esta edición quiso celebrarlo, además de con el reconocimiento de una Espiga de Oro, con un video donde distintas figuras destacadas del cine y del teatro rendían su homenaje a este escenario, caso de la actriz Lola Herrera.
Y entre las mejores experiencias cinéfilas, el haber podido asistir a ruedas de prensa con algunos de los protagonistas del festival…
Tras el primer pase de «Dos días, una noche», el sábado 18 de octubre, los hermanos Dardenne (en el centro), veteranos participantes de la Seminci (en 2011 su anterior film, «El niño de la bicicleta», se llevó una Mención especial para su joven actor protagonista), ofrecieron una rueda de prensa donde compartieron cómo fue el rodaje y su relación con el equipo.
Tras su proyección en el Teatro Calderón, el martes 21, tuvo lugar el encuentro con la prensa de José Luis Montesinos (primero a la izquierda), responsable de «El corredor» (premio al Mejor Cortometraje Europeo) y del equipo del largometraje español, el único de nuestro país que competía en la Sección Oficial, «El arca de Noé» (una de las propuestas más arriesgadas y singulares de esta sección, incomprendida por la mayoría del público).
y los encuentros con cineastas tan creativos como el surcoreano Bong Joon Ho, que con su todavía corta filmografía («Snowpiercer», de 2013, es su último film) es ya todo un referente abordando tramas y estilos muy distintos. Pudimos recrearnos con su trabajo gracias a una retrospectiva de toda su obra y a la selección de varios de los largometrajes que ha reconocido más le han influido.
Bong Joon Ho fue una de las figuras más destacadas de esta Seminci: recibió una de las Espigas de Honor, fue miembro del Jurado Internacional, ofreció una Clase Magistral abierta al público y un encuentro con la prensa. En este último se presentó el libro «Bong Joon Ho. La reinvención de los géneros», editado por Caimán Cuadernos de Cine y la Seminci. En la imagen el cineasta entre su traductora y Carlos F. Heredero, coordinador del libro.
Durante la Master Class o Clase Magistral, en el Aula Mergelina de la Universidad de Valladolid, abarrotada de público mayoritariamente joven, Bong Joon Ho estableció un fructífero coloquio con los asistentes, indicándoles, al iniciar su turno de preguntas, que levantaran la mano aquellos que también se dedicaban al mundo del cine.
Además, pudimos conocer cinematografías no muy difundidas en salas españolas, como la producida en Turquía.
El Photocall interior de la 59ª Seminci recreaba diferentes motivos de Turquía, país invitado del festival por conmemorar este año el centenario de su cine. Por ello se le dedicó una gran retrospectiva bajo el título «La década dorada del cine turco (2004-2014)», compuesta por más de una veintena de películas multipremiadas en festivales internacionales, y con la posibilidad de que el público compartiera proyección con algunos de los directores e intérpretes de los largometrajes seleccionados.
La jornada del 23 de octubre fue «El Día de Turquía en Seminci» y entre las actividades especiales programadas con tal motivo, el coordinador de la retrospectiva, Ahmet Boyacioglu, moderó una mesa redonda sobre la cinematografía turca en la que se aprovechó para presentar la edición española del «Diccionario de Cine Turco», que supone la primera publicación en lengua española dedicada a esta extensa cinematografía. En la imagen, baile turco durante la gala inaugural del festival mientras se proyectaban fragmentos de las películas programadas.
Y aunque no sea lo que más nos interesa de un festival, sin olvidar que ya la pionera competición cinematográfica de los premios Óscar se creó con fines promocionales y concesiones al gran público y potencial espectador de las obras premiadas, nos resultó curioso estar en primera línea gráfica del estreno de la alfombra roja de este 2014. Posar para ofrecer buenas capturas fotográficas, que se difundirán ampliamente, también puede ser un arte…
La fotogenia se presupone en una buena intérprete. En la imagen, demostrándolo en la alfombra roja previa a la gala inaugural, de izquierda a derecha: Sara Rivero, Belén Rueda (madrina de esta Seminci) y Aura Garrido.
Entre la larga lista de invitados, tanto nacionales como internacionales de la alfombra roja de la tarde del 18 de octubre, los hermanos franceses Dardenne y el cineasta coreano Bong Joon Ho (tras él, avanzando aún despreocupados de las cámaras, la pareja formada por el crítico de cine y realizador Fernando Méndez-Leite y la actriz Fiorella Faltoyano).
Así nos gustaría ver siempre las salas de cine: llenas de un público expectante. Festivales como el de Valladolid contribuyen a acercar a una mayoría de espectadores a películas que, de otro modo, quizás no encontraran la divulgación adecuada.
.¿Y sobre las películas? Vimos algunas que nos parecieron estupendas, otras muy interesantes y una minoría que poca huella nos dejó. Nada extraño en una oferta tan amplia y variada. Pero eso será parte de futuras publicaciones… Por ahora solo dar la enhorabuena a la Seminci por seguir dándonos esta intensa y rica oportunidad de poder soñar con historias de autorías tan diversas como especiales. Un cine que, en algunos casos, difícilmente se abre paso en salas comerciales. Por eso escaparates como este continúan siendo tan necesarios.
cristina bosque dijo:
Ya veo que exprimiste los días. Ya irás contando.
http://blog.conideasyaloloco.com
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Atmósfera Cine dijo:
Gracias, Cristina, por tu fiel seguimiento del blog.
Cierto que un Festival como el de Valladolid intensifica tu cinefilia debido a su extenso y rico programa. Escribiré sobre algunos de los títulos que me parecieron más destacables.
Pilar Montes dijo:
Como bien dices escaparates donde exponer un cine de autor tan necesario para aquellos amantes de esta pasión por historias diferentes.
Sin renegar de otras ofertas más comerciales siempre hay oportunidad para todos los gustos en esta industria tan mágica.
Todo gracias al talento de muchos sin olvidarnos del trabajo de divulgación, sin duda este es un magnífico ejemplo de ello y un público que lo sigue y lo aplaude.
Atmósfera Cine dijo:
Gracias, Pilar, por tu comentario.
De acuerdo contigo en lo enriquecedora que resulta la diversidad.
Y ya que las salas comerciales son insuficientes para acoger la pluralidad de autorías, atendamos también como espectadores a las propuestas de filmotecas, festivales y certámenes cinematográficos de todo tipo.
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