El Instituto Internacional del Teatro, organización surgida en 1948 y vinculada a la UNESCO, en 1961 proclamó el 27 de marzo Día Mundial del Teatro. Los eventos en relación con esta jornada incluyen premios de excelencia, actuaciones gratuitas, llamamientos a la solidaridad con los artistas que lo necesitan, jornadas de puertas abiertas en los teatros, galas y reuniones. Pero el acontecimiento más importante de este día es el Mensaje Internacional; todos los años, una destacada figura en las artes escénicas es invitada a compartir sus reflexiones sobre el teatro y la armonía internacional. Este mensaje se traduce a más de 20 idiomas, se lee para los espectadores antes de las actuaciones en los teatros de todo el mundo y se difunde ampliamente.
El autor del primer Mensaje Internacional, en 1962, fue el polifacético artista francés Jean Cocteau (1889-1963), vanguardista autor en literatura, pintura y cine; responsable de la dirección y guion para la gran pantalla de clásicos fílmicos de la experimentación y el surrealismo como “La sangre de un poeta” (1930), “Orfeo” (1950) y “El testamento de Orfeo” (1959), y de la primera y mejor versión cinematográfica del cuento tradicional europeo “La bella y la bestia”, realizada en 1946. En la relación de figuras elegidas para este mensaje anual se encuentran muchas vinculadas tanto al teatro como al cine, caso del dramaturgo y guionista estadounidense Arthur Miller; el actor y director británico Laurence Olivier; el actor, mimo y director francés Jean-Louis Barrault y el director italiano Luchino Visconti. Aunque la mayoría han sido hombres, también encontramos artistas femeninas de la talla de Ariane Mnouchkine, directora francesa de teatro y cine, fundadora del Théâtre du Soleil (1964) en París, y de Judi Dench, actriz británica, sin olvidar a Ellen Stewart, directora y productora teatral estadounidense, fundadora del Club de teatro experimental La MaMa, una de las más exitosas compañías del Off-Off-Broadway, en la que comenzaron sus carreras intérpretes luego famosos en cine, como Al Pacino, Harvey Keitel, Robert De Niro, Danny DeVito, Diane Lane, Billy Crystal y Nick Nolte. Sigue leyendo →
Cine y teatro siempre han estado hermanados. El francés Georges Méliès, uno de los padres del cine de ficción, fue el primero en aprovecharse ampliamente de los elementos de la representación teatral para sus películas; no en vano procedía de los espectáculos de ilusionismo. Con la consolidación del séptimo arte, el teatro también se benefició de historias en origen cinematográficas o de intérpretes lanzados al estrellato gracias a la pantalla grande, sin olvidar los cambios que propició en su técnica escenográfica.
Los clásicos teatrales han resultado, además, gran fuente de inspiración para el cine. La obra “El avaro o la escuela de la mentira” no se quedó al margen de ello. Esta comedia, escrita por uno de los mejores dramaturgos de la historia de las letras, el francés Jean-Baptiste Poquelin, de nombre artístico Molière, y estrenada en el teatro del Palacio Real de París un 9 de septiembre de 1668, cuenta con un par de interesantes adaptaciones fílmicas, las dos respetando el título original. La primera, francesa de 1980, codirigida por Jean Girault y el cómico francés Louis de Funès y protagonizada por este último, cuyo estilo expresivo y de gran gestualidad le vino perfecto para encarnar al avaro de la historia. La segunda, coproducción italo-franco-española de 1990, con los italianos Alberto Sordi y Laura Antonelli como Harpagón y Frosina, los españoles Miguel Bosé y Lucía Bosé como Valerio y Doña Elvira, y la colaboración especial del británico Christopher Lee como el Cardenal Spinosi.
Por otra parte, sería casi imposible enumerar el sinfín de versiones teatrales que ha conocido “El avaro”. Hoy queremos destacar la última que hemos visto. Vayamos por partes:
Origen: La Fundación Benito Ardid es una entidad sin ánimo de lucro constituida en 1989, con sede en Zaragoza (Aragón, España) y clasificada de interés social, cuyo fin es la atención global a personas con discapacidad intelectual. En 2011, entre sus actividades, se planteó un taller de expresión corporal e interpretación impartido por el veterano actor argentino Hernán Romero Santiso.
Nudo: El entusiasmo de todos los participantes del taller animó a continuarlo con el fin de representar una obra teatral concreta, con ensayos durante un año, dos tardes a la semana, y la formación de una compañía llamada La Traca Teatro que, integrada por doce actores y dirigida por Hernán Romero, estrenó una adaptación de “El avaro” el 21 de abril de 2012 en el Teatro del Mercado de Zaragoza.
Cartel anunciador de actuaciones de La Traca Teatro.
Las funciones allí escenificadas registraron un lleno total y el éxito continuó en posteriores actuaciones en Zaragoza: en el Centro Cívico El Matadero y en el Centro Joaquín Roncal.
Puedes leer noticias del estreno y ver un video de la rueda de prensa pinchando aquí y aquí.
Tuvimos oportunidad de acudir a un preestreno de la obra y nos divertimos tanto que repetimos asistencia. En esta segunda ocasión, la compañía fue tan amable de permitirnos hacerles fotos antes de la representación y durante la misma y de responder a unas preguntas.
Gema López, monitora de la Fundación que también actúa en la compañía encarnando a los personajes de Frosina y Don Anselmo, nos aclaró que se estrenaron ante el público con “El avaro” porque “fue la escogida por nuestro director Hernán, ya que es una obra muy dinámica, con muchos entresijos, de entradas y salidas muy divertidas. Aunque al principio nos pareció que fue una apuesta muy valiente y nos dio un poco de miedo, tiramos hacia delante y hemos conseguido luego un gran éxito”. Sobre los cambios introducidos respecto a la obra original: “aunque se partió de una obra ya adaptada, nuestro director tuvo muy en cuenta la opinión de los actores. Siempre que le hemos propuesto algo le ha visto el lado positivo y, al final, hemos hecho una obra nuestra”. Para Gema lo más gratificante de toda la preparación ha sido, sin duda, “la compañía, el equipo, los chavales. Lo divertido que es el grupo y cómo nos ayudamos y compartimos. Nadie se siente más que otro. Es una compañía muy natural. Como dice Hernán: el trabajo sincero de los actores de esta compañía nos acerca a la verdad. Por eso es muy fácil estar aquí”. Y ante la pregunta de qué fue lo más costoso, nos responde: “cada uno tenemos nuestras dificultades y limitaciones. A alguien le ha podido costar más aprenderse el papel, a otras personas más el moverse por el escenario…Pero ha sido un trabajo que todos hemos ido aprendiendo poco a poco y, al final, creo que todos hemos llegado a donde teníamos que llegar, y seguiremos trabajando para llegar todavía más lejos”. No nos queda ninguna duda, el espíritu de superación lo lleva toda la compañía dentro, se nota.
En el centro, Ana Bas y Maite Castillo, de La Traca Teatro, y a su lado dos de los asistentes de lujo a esa representación: Luis Rabanaque y Laura Gómez-Lacueva, veteranos profesionales actualmente muy populares por sus divertidísimos personajes en el exitoso programa “Oregón Televisión”, que se emite en la cadena autonómica Aragón televisión.
Ana Bas, que interpreta el papel de Elisa, nos contó sobre su experiencia como actriz en esta obra que “como crecimiento personal ha sido muy buena, pues siempre me ha gustado la interpretación, cantar, bailar…y quería hacer algo como esto”. Lo más gratificante para ella ha sido “el cariño de mis compañeros, el estar con ellos, el profesor y director Hernán y el aplauso del público”. Sobre lo más difícil, reconoce que “al principio me costó encontrar mi personaje pero al final lo logré”. Ana recomienda ver la obra “porque la hemos trabajado durante año y medio, la hemos hecho con mucho cariño y creo que merece la pena”. Desde luego que sí.
Con las imágenes que tomamos durante una de sus funciones hemos preparado este fotomontaje. La natural limitación del no uso del flash afecta a su calidad, pero sirva como gesto de nuestra particular enhorabuena por el gran trabajo de toda la compañía.
Continuación: Tras el paréntesis veraniego, a partir de septiembre la compañía volverá a los escenarios con más funciones de “El avaro”, si bien se barajan nuevas obras para el futuro. Atentos a las publicaciones en su Facebook.
Frente al egoísmo y mezquindad del personaje clásico de Molière, La Traca Teatro es otro ejemplo de triunfo de la generosidad y del compañerismo.